domingo, 10 de julio de 2011

EL PODER DE LA SANGRE



















Steven Spielberg es un nombre que a los buenos aficionados al cine hace esbozar una sonrisa de garantía. Ya sea ahora en el proyecto de la película de Tintín o en cualquier otra faceta, que él ponga su sello a un producto suele ser sinónimo de proyectos que pueden triunfar o fracasar, pero siempre son ambiciosos y con los suficientes requisitos de calidad.



Junto con el protagonista (Tom Hanks) con el que había regenerado el género de películas de la II Guerra Mundial, se decidieron a co-producir un proyecto televisivo para la HBO, con financiación nortamericana y británica, donde se narrarían los avatares de la Compañía Easy. Basándose en las prosopografías de de Stephen Ambrose sobre los integrantes de dicho núcleo militar, el programa trataría de ser una recreación fideligna que permitiera a los espectadores ver el día a día y la vida cotidiana de los jóvenes soldados enviados a Europa durante la última fase de la contienda.
La serie pronto cuajó a la perfección en el mercado estadounidense por motivos obvios, asociaciones de veteranos, descendientes de los protagonistas... Aunque el programa acentuó algunas situaciones y buscó un mayor dramatismo, su rigor histórico, especialmente en materia de armamento y escenarios. Incluso podríamos decir que este factor es uno de los hechos que hacen que sea una serie que pueda generar cierto aburrimiento en aquellos espectadores no fascinados por la historia bélica, ya que el asalto a una posición puede durar perfectamente todo un episodio, en un ejemplo de tiempo real, pero no precisamente el método para obtener un generoso share.
Hoy, varios años después de su estreno, es innegable su relevancia e importancia. Abrió de nuevo la ventana de las series históricas, siendo su heredera "The Pacific" solamente la más evidente de las muchas influencias. De cualquier modo, igual que le ocurre a esa gran película que es "Salvar al soldado Ryan", uno hecha en falta un poco más de leyenda negra a la hora de hablar del bando de los Aliados, aunque se muestran venganzas personales contra los colaboracionistas en los Países Bajos o el maltrato a algún prisionero de guerra, da la sensación de que hay una versión muy light de lo que verdaderamente debió de sentir un soldado atrapado en aquel infierno.



Lo cual no quiere decir que uno vaya a subestimar (en lo más mínimo) el papel de aquellos pobres reclutas, generalmente arrancados de la tranquilidad de sus pueblos y que ninguna culpa tenían, para batallar contra uno de los regímenes más atroces que jamás se forjaron en el Viejo Continente. Sirva como muestra el capítulo donde la compañía Easy entra en persona a un campamento de concentración, en una procesión macabra donde al fin comprenden que esas rumorologías sobre lo que les están haciendo a judíos, gitanos y otras minorías es totalmente cierto.
A nivel artístico, "Band of brothers" recolectó 19 premios Emmy. Siendo honestos, es una serie que siempre he podido ver con agrado, me ha interesado mucho, especialmente a nivel histórico, pero tengo que decir que también tiene un exceso de densidad que quizás yo creo que radica en que no da un momento de tregua en las trincheras, y a veces hay que distinguir entre el documental y el entretenimiento. "Save Private Ryan" era igual, pero es solamente una película, que se ve con un nudo en la garganta, pero decenas de episodios de la misma temática y que no ofrecen otra perspectiva hacen que uno lo considere un plato que se tomaría con gusto una vez cada cierta considerable capacidad de tiempo, por temor a repetir.
Una humilde recomendación para aquellas personas que no la han visto pero que se dispongan a hacerlo, es que pese a que la labor de doblaje es buena, merece muchísimo la pena que la vean en versión original. Los diversos tipos de acentos y la forma de expresarse cuadran a la perfección con la zona de procedencia de cada uno de los miembros de la Compañía. El reparto es muy competente, aunque creo que falta verdaderamente un protagonista o un verdadero hilo conductor entre tanta coralidad, a veces incluso es un poco confuso el vaivén de personajes.
El éxito innegable de las desventuras en uno de los acontecimientos más trascendentales de la Historia Contemporánea, de ese grupo de soldados norteamericanos, es impagable en el sentido de que demostró que era un género que podía tener su hueco en el espacio televisivo, cosechando buenas críticas y rendimiento.Muy recomendable, con posibles momentos de cierta aridez.

2 comentarios:

Easmo dijo...

No quiero ser tocahuevos pero ¿es cosa mía o te has olvidado de poner el título de lo que reseñas al lado de la imagen inicial? Porque a menos que yo sea un cateto ignorante y el nombre de la serie sea el mismo que el del post, me da que se te ha olvidado...

El Viejo dijo...

No, no es una mala apreciación, es correcta. Por supuesto, la serie es "Band of Brothers", traducida aquí de una forma un poco subjetiva como "Hermanos de Sangre".