domingo, 2 de agosto de 2020

UN BRINDIS POR BEL


Marzo de 1933. La revista Weird Tales publica un relato de Robert Ervin Howard, uno de los grandes talentos de la publicación, junto con colegas como Howard Phillips Lovecraft o Clark Ashton Smith, entre otros. El protagonista del mismo es un cimmerio de ojos azules, quizás uno de los pocos rasgos que le diferencia de otro bárbaro howardiano: Kull de Valusia. "La torre del Elefante" no es la primera narración sobre un personaje que llegará a ser monarca de Aquilonia por sus méritos, pero sí es la aventura que permite que el personaje alcance la esencia, ese punto donde una ficción halla todos los elementos que la pueden hacer memorable para el gran público.   



Personalidad atormentada, las traducciones castellanas de Howard no siempre han sido todo los fieles que habría podido desearse. Sobresale en el panorama castellano el trabajo de Javier Fernández, realmente notable y muy próximo al estilo del escritor texano, en ocasiones incluso deslavazado, pero siempre vertiginoso y plagado de pasión. Un literato soñaba con que el imponente guerrero le dictaba sus memorias en distintas etapas de su vida, desde su sombría cuna hasta sus momentos de mayor gloria, pasando por enormes decepciones. 



En esta ocasión, Conan era ubicado en "La torre del elefante" durante su primera juventud, visitando una de las ciudades más populosas de la Edad Hiboria, el fascinante marco protohistórico en el que se desarrollaban sus hazañas: Zamora. Roy Thomas, afamado guionista de cómics y fiel estudioso del corpus literario howardiano, unió su talento al del ilustrador británico Barry Windsor Smith para recrear con maestría la atmósfera de la taberna donde todos los ladrones de la urbe comparten jactancias y peligros. Un puro spaghetti western antes de que existiera este tipo de western, con chispeantes diálogos. 


Su propia infancia de mudanzas por el estado de Texas convirtieron a Howard en un apasionado de la narrativa de frontera. Asimismo, hijo de su tiempo, estaba influenciado por concepciones atávicas de los auges y caídas de civilizaciones, un darwinismo social que a día de hoy, por fortuna, podemos rebatir con facilidad. No obstante, lo que siempre engancha a nuevas generaciones sobre él es el vigor de su prosa, plagada de tintes poéticos por herencia materna. 



Persona cultivada en la Antigüedad, el creador de Conan plagó de referencias sus relatos. Aquí, hallamos la figura de Bel, deidad de los ladrones, claro homenaje al culto mesopotámico y que nos transporta a una especie de Sodoma capaz de deslumbrar a un audaz viajero. En contraste con su improvisado aliado en la aventura, Taurus de Nemedia, el cimmerio se moverá por impulsos para hacer el robo más audaz posible en el domicilio de alguien que es temido por el propio monarca de Zamora: el brujo Yara. 



Aunque con tendencia a recargar la adjetivación y, en algunos escritos, a potenciar en exceso a sus protagonistas en lo indestructible de su salvajismo, "La torre del Elefante" se lee conteniendo el aliento, ágil y logrando complicidad con la persona lectora, quien está encantada de imaginar las sugerentes propuestas de Howard. Barry W. Smith dejó una narración en viñetas memorable con Yara caminando sin tocar el suelo, reflejando el poder de la magia, tan alejada de la órbita del fiero ladrón. 


Recientemente, y también de forma fascinante, el dueto formado por el guionista Kurt Busiek y el dibujante Cary Nord han dejado una nueva versión de esta trama que rompe con algunos esquemas clásicos de los enfrentamientos de espada y brujería. Dicha etapa tiene un fascinante añadido en los colores de Dave Stewart, excelente en sus homenajes a los tonos pulp originales y al estilo de Frank Frazetta, cuyas portadas hicieron pervivir al cimmerio en el imaginario popular incluso tras el suicidio de Howard.



"La torre del Elefante" proporciona un salto de profundidad que lo da Yag-kosha, una delicia de creación que permite explorar cuestiones que se alejan de los clichés. Influenciado por su amigo epistolar Lovecraft, Howard se permite aquí saltar dimensiones, demostrar incluso a su indestructible protagonista que hay más cosas en el cielo y las estrellas de las que alcanzan sus enseñanzas con Crom.



De repente, el fiero bárbaro sintió vergüenza de su raza. Y, en ese momento, no se refería a las mujeres y hombres de Cimmeria, tuvo una mirada universal. Aquel coloso dispuesto a pisar con sus sandalias los tronos enjoyados de la Tierra vio desmoronarse la inmensa torre del Elefante, sintiéndose pequeño y humilde. Ninguna lectura mejor para iniciarse con Conan.



BIBLIOGRAFÍA:



- FERNÁNDEZ, J. (ed.), La reina de la Costa Negra y otros relatos de Conan, Cátedra, Madrid, 2012, pp. 99-132. 



-THOMAS, R., "Conan the Marvelous: La desconocida historia de Conan el Bárbaro", nº 4 (1998), s.f. Traducción: Joan Josep Mussarra. 



VACACIONES VERANIEGAS: Por descanso estival, el blog permanecerá sin actualizarse hasta el próximo 23 de agosto, donde se retomará con normalidad al ritmo de una entrada semanal. Como siempre, agradecer a cualquier persona que haya prestado su atención y valioso tiempo a seguirlo. Feliz verano y nos leemos al retorno. 



FOTOGRAFÍAS EXTRAÍDAS DE LOS SIGUIENTES ENLACES:






https://starsmydestination.wordpress.com/2019/04/23/conan-el-barbaro-omnibus-1-la-etapa-marvel-original-1a-parte/ [Propiedad de la fotografía: Marvel Cómics] [Consultada el 02/08/2020]



https://muldercomics.wordpress.com/2005/11/20/conan-22/ [Propiedad de la fotografía: Dark Horse] [Consultada el 02/08/2020]

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